Si nos quedamos sentados en una silla, cama o cualquier otro lugar la muerte nos llega. Si caminamos nos llega igual. Si corremos... También.
Independientemente de lo que hagamos o dejemos de hacer, ella nos visita para llevarnos a dar un paseo sin retorno a algún lugar desconocido... Es como una madre... Siempre está presente.
No se puede huir de ella pero si atrasar su llegada ~
Por los momentos sólo nos queda disfrutar antes de enfrentarnos a ella.
Nota: La imagen no tiene nada que ver con el texto, pero la conseguí y es mi primera firma hecha por mi y la subí a lo random uwu
No hay comentarios:
Publicar un comentario